Reunión de Socios

Si te mueves por Ourense, seguro que conoces o al menos te suena la Asociación de Veciños As Laxas, que está muy activa en As Curuxeiras. Son de esas asociaciones que realmente hacen vida de barrio, organizando eventos que reúnen a un montón de gente casi todos los meses. No solo se encargan de la Reunión de Socios anual, que por cierto, suele ser en abril, sino que tienen un calendario lleno de actividades. Piensa en la fiesta de Navidad, donde todos los niños del pueblo reciben regalos, o las celebraciones de San Brais y el Entroido. También montan fiestas para los mayores en septiembre, la fiesta de callos en octubre y la sardiñada de San Xoán. La verdad es que se nota el esfuerzo por mantener viva la comunidad, y la Reunión de Socios es un momento clave para ellos, dirigida específicamente a sus miembros para organizar y seguir adelante con todo esto.

Para que te hagas una idea del ambiente que se respira en sus eventos, mira lo que fue el Magosto de As Curuxeiras hace poco. Celebraron su 37ª edición en el Campo da Festa de As Curuxeiras, en una tarde de otoño que, por lo que cuentan, fue espléndida y soleada, con ese olor a tradición que tanto nos gusta. Se juntaron unas 130 personas para una comida popular que no le faltaba de nada: churrasco, panceta, criollos, chorizos, castañas a fartar, vino, bica, café y licores. José Antonio Bautista, que lleva encargándose de la comida desde el principio, lo resumía muy bien: “xuntarnos unha vez máis, os nenos e os vellos, é unha forma de convivir e de pasalo ben, sobre todo para a xente dos pueblos, que estamos quedándonos sin xente e hai que aproveitar estas ocasións”. Comentaba también cómo ha cambiado la tradición del Magosto, que antes era solo castañas en el monte y ahora se aprovecha para meterle mucha más carne y disfrutar a lo grande.

El ambiente era de esos que invitan a quedarse, con mucha fraternidad vecinal y folclore. Después de la comida, la fiesta siguió con música de 'Disco Mobil Show' y una colchoneta para los más pequeños, y no faltó un buen 'rexantar'. José Manuel Casares, otro de los organizadores, decía que, aunque para comer fueron ciento y pico, para la fiesta de la tarde se unieron muchos más. Es un pueblo pequeño, pero con un espíritu enorme, y se nota que quieren llegar al 75 aniversario de la fiesta. Así que, aunque la Reunión de Socios es más interna, estas celebraciones abiertas a vecinos, familias y amigos, incluyendo a los niños y los mayores, son el reflejo de lo que la asociación busca: mantener unida a la gente de As Curuxeiras.