💰 Tipo de entrada: De pago
👤 Edad recomendada: +0
🔗 Links:
Viaje al siglo XIV en Manresa a través del Centro de Interpretación de la Calle del Balç, explorando el urbanismo medieval y la historia del rey Pedro III el Ceremonioso.
Manresa, la vibrante capital del Bages, invita a sus visitantes a un fascinante viaje en el tiempo, directamente al corazón de su esplendor medieval. El evento 'Paseo por Manresa y viaje al siglo XIV' no es una simple visita, sino una experiencia inmersiva que se centra en la emblemática Calle del Balç y su Centro de Interpretación, un espacio diseñado para transportarnos a la Manresa del siglo XIV.
El Centro de Interpretación de la Calle del Balç, ubicado en una antigua casa noble, es el punto de partida de esta aventura histórica. Aquí, a través de recursos multimedia y una cuidada exposición de objetos de la época, los visitantes pueden conocer de primera mano cómo era la vida en Manresa durante su 'siglo de oro'. La narrativa se personaliza en la figura del rey Pedro III el Ceremonioso, un monarca clave en la forja de las instituciones catalanas más importantes de la historia, cuya influencia fue fundamental para el desarrollo de la ciudad.
La Calle del Balç en sí misma es una joya del urbanismo medieval catalán. Estrecha, sinuosa y con distintos niveles escalonados, se adapta al perfil de un risco, discurriendo entre porches que se alzan entre casa y casa. Estos pasajes cubiertos son un testimonio de cómo se aprovechaba el escaso espacio dentro de la ciudad amurallada, conservando una atmósfera plenamente medieval que invita a la contemplación y al descubrimiento.
El siglo XIV fue, sin duda, una época de gran prosperidad para Manresa. La ciudad experimentó un crecimiento demográfico y urbanístico notable, pasando de ser una pequeña villa fortificada a una verdadera urbe. Este auge se tradujo en la construcción de importantes obras civiles y religiosas, muchas de las cuales aún hoy definen el paisaje de Manresa. La imponente Basílica de la Seu, el Pont Vell y el Pont Nou, así como la ampliación de las murallas, son ejemplos de la ambición y el ingenio de aquella época.
Un hito fundamental de este periodo fue la construcción de la Séquia de Manresa, una obra de ingeniería medieval que, desde 1339, ha sido vital para el abastecimiento de agua a la ciudad. Su construcción no estuvo exenta de conflictos, como la disputa con el obispo de Vic, que, según la leyenda, se resolvió gracias a la 'Misteriosa Luz' que, el 21 de febrero de 1345, iluminó la iglesia del Carmen, un evento que aún hoy se celebra con las 'Festes de la Llum'. Este contexto histórico enriquece la visita a la Calle del Balç, ofreciendo una comprensión más profunda de la relevancia de Manresa en la Edad Media.
El Centro de Interpretación de la Calle del Balç ofrece visitas guiadas que suelen tener una duración aproximada de una hora, disponibles en español. Es un espacio que se esfuerza por ser inclusivo, con medidas de accesibilidad física para sillas de ruedas y, en ocasiones, personal con conocimiento de lengua de signos, aunque se recomienda indicar estas necesidades al hacer la reserva.
Además de las visitas generales, el centro organiza actividades especiales para grupos escolares, visitas teatralizadas y eventos gastronómicos, lo que lo convierte en un destino versátil para diferentes públicos. La entrada al centro tiene un coste, con opciones de visita libre, guiada general y reducida, y la buena noticia es que los menores de 8 años pueden acceder de forma gratuita, haciendo de esta una actividad ideal para familias. Es importante tener en cuenta que el centro ha estado cerrado por obras de mejora de accesibilidad hasta el 18 de septiembre de 2025, por lo que se recomienda verificar la disponibilidad antes de planificar la visita.
La experiencia en la Calle del Balç es solo una puerta de entrada a la riqueza histórica de Manresa. La ciudad ofrece un amplio patrimonio medieval que incluye la majestuosa Basílica de Santa María (La Seu), el antiguo Pont Vell y el Pont Nou sobre el río Cardener, y los restos de la muralla medieval. Cada rincón del centro histórico, con sus calles como la de Sant Miquel o la Plana de l’Om, resuena con ecos de un pasado glorioso.
Manresa es una ciudad que ha sabido preservar su legado, permitiendo a los visitantes conectar con su historia de una manera tangible y emocionante. Este paseo por la Calle del Balç es una oportunidad inmejorable para comprender la esencia de la Manresa medieval y el impacto duradero de un siglo que la definió.
Suscríbete para recibir los mejores planes de Manresa en tu correo.