Podemos Volar sin Alas

Este noviembre, A Coruña se transforma con la novena edición del Festigual 2025, el Festival de las Artes por la Inclusión y la Diversidad. Del 5 al 28 de noviembre, la ciudad acoge una programación que se extiende por más de una docena de espacios, apostando por el arte que nace desde las 'márgenes' y que pone a las personas en el centro de la cultura. Es un festival que ha crecido en diálogo constante con la ciudad, abriendo escenarios, museos y centros sociales a propuestas donde la accesibilidad es el punto de partida, demostrando que la cultura puede ser para todas y todos. A Coruña se convierte así en la capital de la inclusión y la diversidad, acogiendo distintas disciplinas artísticas con el propósito de concienciar sobre la urgencia de facilitar espacios donde todo el mundo pueda acceder a las artes y promocionar propuestas artísticas creadas por colectivos diversos.

Dentro de esta programación, hay un espectáculo que me ha llamado la atención: "Podemos Volar sin Alas". Se trata de un espectáculo poético de monicreques que celebra la diversidad y el poder de los sueños. La historia sigue a la Princesa Tetê, una joven en silla de ruedas que sueña con volar y descubrir el mundo. Creado e interpretado por Cris de Miguel, el montaje combina narraciones multiculturales, música en vivo y técnicas como el kamishibai o el teatro de sombras para transmitir un mensaje de inclusión y esperanza. La función de "Podemos Volar sin Alas" será el viernes 14 de noviembre de 2025 en la Fundación María José Jove. Es importante saber que la sesión de las 11:30 h está específicamente dirigida a centros escolares, aunque el festival en general busca acercar la cultura a todos los públicos, incluyendo familias y personas con diferentes capacidades.

Una de las cosas que hace que el Festigual 2025 sea tan especial es que todos sus espectáculos son gratuitos. Esto facilita mucho que cualquiera pueda acercarse y disfrutar de las propuestas. El festival consolida un modelo que rompe con las lógicas normativas de la cultura y reivindica la creación como espacio de identidad, diversidad y comunidad, creciendo cada año gracias al trabajo de personas y colectivos locales. Colaboran en esta edición la Diputación de A Coruña, la Fundación María José Jove y Vegalsa, lo que ayuda a que el festival siga siendo un referente de la ciudad que se construye, buscando siempre la inclusión y la diversidad a través de las artes.